Consejos para una buena relación entre tu hijo y tu novio

De un tiempo a esta parte, Johanna ha tenido problemas. Su niño de 7 años está empecinado en rechazar a su novio, un apuesto joven con quien ha estado saliendo ya varios meses y ha presentado incluso a la familia.

La relación se hace más seria cada vez y el novio almuerza casi a diario con ella, los fines de semana está en la casa y no puede ni acercarse al niño quien reacciona violentamente ofendiéndolo física y verbalmente.

Este caso de rechazo no es nuevo, sucede en el seno de muchas familias y son un quebradero de cabeza para las mujeres que quieren rehacer su vida con una nueva pareja y, generalmente, genera peleas entre la pareja misma. En el peor de los casos, esta nueva relación puede terminar si es que no se solucionan los conflictos.

Para empezar, hay que entender el porqué de esta reacción. Para un niño, la llegada de una nueva persona, a quien verá de la mano con su mamá o en actitudes cariñosas, será una suerte de invasor que disputará la atención de ella.

Peor aún, si este «extraño» empieza a participar en su disciplina, regañándolo o imponiéndole castigos, la situación se agravará. Para una personita de esa edad, será una disputa por el amor de la mamá.

Por lo tanto, la solución no estará en regañar al niño, sino de a pocos tratar de involucrar a la nueva pareja en las actividades del niño, tales como juegos, o películas favoritas y salidas a actividades al aire libre.

Ir volviéndose su amigo y ganándose su confianza. La mamá debe de explicarle, cuantas veces sea necesario, que ella será siempre su mamá y que ese vínculo entre los dos será indisoluble.

Si el hijo es adolescente, estos casos se dan, porque tal vez el hijo esté negando la separación de la mamá con el padre y no aceptará a alguien nuevo en la vida familiar, esto aunado al proceso de cambios puede agravar la situación. Tanto el padre como la madre deben participar explicándoles que aún cuando rehagan ambos sus vidas, ellos, como padres, estarán allí para él.

Recuerda que tu hijo es lo más importante y nunca debe de ser relegado o minimizado en sus actitudes simplemente con castigos. La pareja no debe regañarlo ni lastimarlo, solamente aconsejarlo y dejar en claro que la disciplina va por parte de la mamá.

Quizás por este lado puede fungir de consejero del niño y ganarse su confianza. Los cambios no vendrán de un día para otro, hay que tener mucha paciencia y si tu pareja realmente te ama, estará dispuesto a hacer lo necesario para integrarse en la vida de tu hijo.

Fuentes: TodoExpertos, ElInformador.

Imagen: GraceNGlamour.

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Acerca del autor

Escrito por Carla Gonzales

Egresada de Literatura en la UNMSM, periodista y correctora de textos y estilo. Actividades: leer, escuchar rock clásico, jazz, blues, proyectos literarios.

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